CEVE aporta la visión empresarial de los riesgos psicosociales

Jaime López, Vicepresidente de CEVE, intervino como ponente en el acto de presentación de los resultados del mayor estudio sobre los factores estresantes de la profesión Veterinaria.

Boehringer Ingelheim junto a la UNED han impulsado esta investigación, presentada el pasado 22 de marzo, para poner en el centro la Salud Mental del Veterinario y de esta manera visibilizar, sensibilizar, fomentar el autocuidado e incitar cambios en el ecosistema laboral.

En su intervención Jaime López enfatizó la importancia de integrar los derechos laborales en las políticas de las empresas, conforme a la legislación. Explicó que el cuidado de los empleados es una responsabilidad empresarial ineludible, destacando la complejidad de los riesgos sociales y de salud psicosocial que deben ser gestionados tanto dentro como fuera del ambiente laboral. 

En este punto aprovechó para realizar un importante inciso: en los centros sanitarios veterinarios trabajan veterinarios junto con otros empleados, ACVs, peluqueros, administrativos, etc. con lo que es necesario que se tenga en cuenta a todos los profesionales en los planes de prevención y atención. 

López destacó la relevancia del bienestar mental en el trabajo, señalando cómo afecta la capacidad de los trabajadores para desempeñarse eficazmente y contribuir a sus comunidades.

Según la opinión del Vicepresidente de CEVE los riesgos psicosociales representan un desafío al que se enfrentan las pequeñas empresas. Y la explicación es evidente: los factores que afectan a la salud mental no solo residen en la empresa, sino que muchos de ellos son ajenos al trabajo(situaciones familiares y del entorno, por ejemplo). De hecho, las personas que peor salud mental tiene no son precisamente las que trabajan, sino las que están en paro. 

No obstante, y muy acertadamente, trajo a colación una cita de Fligey (2006) para poner en relieve los problemas inherentes a la fatiga por compasión que experimentan los profesionales veterinarios en su puesto:   

Estamos expuestos todos los días al dolor, crueldad con los animales, muerte, decisiones sobre la misma, dificultades económicas. Nos enfrentamos constantemente a dilemas morales, nos sentimos juzgados constantemente por la sociedad que en muchas ocasiones nos hace sentir culpables de falta de vocación por el hecho de cobrar por nuestro trabajo.

Por lo tanto, tal y como Jaime López reconoció, es urgente desarrollar mejores métodos para prevenir y manejar el estrés en el sector.

El personal veterinario está expuesto a diario a situaciones de estrés que son difícil de gestionar emocionalmente.

El 97,17 de las empresas del sector de centros sanitarios veterinarios tienen menos de 10 empleados, por lo tanto, la gestión de los riesgos psicosociales es complicada. Según comentó Jaime López las encuestas, tradicional herramienta para gestión de los riesgos psicosociales, son difíciles de implementar en empresas tan pequeñas, apuntando que puede producir en los trabajadores más estrés que el que se pretende evitar, siendo necesario buscar nuevas herramientas de prevención. 

La retención del talento es uno de los caballos de batalla de las empresas veterinarias. Jaime López vinculó la satisfacción laboral con factores como salarios competitivos y calidad de vida, señalando que dicha calidad de vida es un factor al que las nuevas generaciones de trabajadores dan tanta importancia, o más, que a los salarios. 

En su intervención aportó una interesante perspectiva de la relación de los riesgos psicosociales con el absentismo laboral, describiéndola como un círculo vicioso. En las empresas pequeñas el absentismo provoca una mayor carga de trabajo y mayor riesgo de estrés.

Jaime López aportó una perspectiva del problema en la que absentismo y los riesgos psicosociales se retroalimentan.

El absentismo por incapacidad transitoria es de un 5,5%, lo que quiere decir que al cabo de un trimestre un millón de trabajadores no ha asistido al trabajo (que se traduce en pérdidas de 5.000 – 6.000 millones de euros). Además, la tasa de absentismo en las profesiones sanitarias es la más alta, llegando al 12%.

Dadas que las implicaciones económicas para las empresas y para el bienestar para los trabajadores son importantes razones, animó a trabajar en la prevención de riesgos y en la mejora de la calidad de vida en el trabajo.

En 2019 CEOE (a la que CEVE pertenece) y los principales sindicatos se adhirieron al convenio 190 y recomendación 206 de la OIT para la eliminación de la violencia y el acoso en el trabajo, entroncado con la agenda 2030. de Desarrollo Sostenible, en particular en la consecución de los objetivos 5,2 sobre la eliminación de la violencia contras las mujeres y 8,5 sobre la consecución de un trabajo decente para todos. Asimismo, proporcionan un marco de trabajo común para todos los países, con el fin de afrontar el trabajo libre de violencia y acoso.

El Vicepresidente de la patronal veterinaria recordó que ya en 2019 CEVE publicó el Manual de Riesgos Laborales para Centros Sanitarios Veterinarios que ahora es el referente en el sector, al que podéis acceder haciendo clic aquí. Ya entonces, el primer capítulo estaba dedicado a los riesgos psicosociales, siendo la Confederación Empresarial Veterinaria pionera en este tema. 

En el 2020 CEVE promovió el primer convenio colectivo (hecho que causó sorpresa en el mundo empresarial ya que no suele ser una patronal la que promueva un convenio) donde se introdujeron los acuerdos sobre prevención de riesgos laborales, incluyendo los psicosociales. En el segundo convenio firmado en 2023 se refleja la alianza entre la empresa y el trabajador en la prevención de riesgos laborales: igualdad, seguridad laboral, acoso sexual y laboral y algo novedoso, se establece la formación específica en riesgos laborales y psicosociales con el objetivo de que los trabajadores sean perfectamente conocedores de los riesgos, lo que sin duda hará que las empresas veterinarias avancen más rápidamente en este terreno. 

En su intervención, Jaime López señaló la implicación de todos los centros veterinarios que pertenecen a alguna organización empresarial de la Confederación a la hora de implantar los protocolos de prevención de riesgos y de acoso laboral. Para ello CEVE incentiva que se realice de forma proactiva. 

Para concluir, Jaime López reiteró el compromiso de CEVE con los profesionales que trabajan en los centros veterinarios y la necesidad de desarrollar un sector que fomente tanto la pasión y dedicación al trabajo, como la salud y el bienestar de los empleados.

Expresó su optimismo respecto al futuro del sector y la continuidad en el avance hacia la resolución de los desafíos que presentan los riesgos psicosociales.


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